Somos conscientes de que Works United ha anunciado un día de paros en una pequeña porción de nuestras cafeterías de Estados Unidos esta semana.
-Starbucks.
Miles de baristas y empleados de Starbucks en EE UU amenazan con ir esta semana a la mayor huelga de la historia de la cadena de cafeterías, a la que acusan de negarse a negociar ciertas condiciones de trabajo a los empleados que se han sindicado en los últimos años.
Los paros están liderados por el sindicato Starbucks Workers United, que en dos años ha superado las 350 cafeterías representadas y los 9.000 afiliados. Será este jueves 16, coincidiendo con el Red Cup Day, una evento promocional en el que Starbucks suele entregar vasos reutilizables a los clientes con motivos navideños.
El mencionado sindicato defiende que Starbucks se ha negado a negociar de buena fe cuestiones como la dotación de personal o los horarios. La cadena de cafeterías, por su parte, echa las culpas al sindicato. Las partes ni siquiera se han llegado a poner de acuerdo sobre si los trabajadores podían participar en las reuniones por vía telemática.
“Somos conscientes de que Works United ha anunciado un día de paros en una pequeña porción de nuestras cafeterías de Estados Unidos esta semana”, dice Starbucks, que niega una mala conducta.
El ritmo de captación de trabajadores por parte de los sindicatos se ha frenado en los últimos tiempos, en tanto que ninguna de las cafeterías ha llegado a cerrar un acuerdo colectivo con la empresa. Algo que estaría ligado con las más de 100 quejas que se han emitido desde la Junta Nacional de Relaciones del Trabajo de Estados Unidos (NLRB por sus siglas en inglés), la agencia federal que gobierna la relación entre empresas, sindicatos y trabajadores, contra la propia cadena de cafeterías por llevar a cabo supuestas tácticas antisindicales, como el cierre de tiendas, el despido de trabajadores activos en las reivindicaciones, o la negativa a negociar con cafeterías sindicadas.
Las investigaciones y apelaciones en estos casos pueden prolongarse durante años, y la NLRB carece de autoridad para dictar sanciones o responsabilizar a ejecutivos por irregularidades. De ahí que el sindicato haya desplegado otras tácticas, como el contacto con políticos, clientes y estudiantes de universidades donde Starbucks tiene contratos. El 16 de noviembre, los huelguistas prevén acudir a cafeterías no sindicalizadas para intentar unir a la causa a otros compañeros. CH
