Starship, el poderoso cohete espacial diseñado por la compañía SpaceX de Elon Musk, registró su primer vuelo de prueba completamente exitoso amerizando en el Océano Índico sin ninguna explosión ardiente que pusiera fin a los intentos anteriores.
La misión de demostración desde el complejo de lanzamiento de Boca Chica en Texas envió a Starship a casi 130 millas (210 km) de altitud, a una velocidad superior a 16.000 mph (25.700 km/h), mostrando la capacidad del cohete más poderoso del mundo en el que la NASA confía para algún día enviar humanos a Marte.
SpaceX celebró su regreso intacto como el verdadero logro del vuelo. Siguió a un aterrizaje forzoso y la destrucción de la nave sin tripulación en noviembre pasado, siete meses después de que su lanzamiento de prueba inaugural terminara de manera similar, y su ruptura en el reingreso después de un viaje alrededor del planeta en marzo.
«A pesar de la pérdida de muchas baldosas y una solapa dañada, ¡Starship llegó hasta un aterrizaje suave en el océano!» Musk, el director ejecutivo de SpaceX, escribió en una publicación en X, la plataforma de redes sociales que el multimillonario también posee.
Musk elogió el cuarto vuelo de prueba, de una hora de duración, como «un logro épico». La compañía ha expresado con frecuencia su «fracaso» a la hora de ser una parte crucial de su proceso de desarrollo hacia un sistema de transporte de tripulación seguro y fiable.
El vuelo de Starship se produjo el mismo día en que la NASA dio detalles de una fuga de helio a bordo de la cápsula Starliner de Boeing, que se lanzó el miércoles en su primera misión tripulada a la Estación Espacial Internacional.
La agencia espacial ha contratado tanto a SpaceX como a Boeing como socios comerciales para llevar astronautas tanto a la órbita terrestre baja como al espacio profundo. En 2021, la NASA eligió Starship como su módulo de aterrizaje preferido para el programa Artemis, que tiene como objetivo devolver a los humanos a la Luna por primera vez desde 1972 y, en última instancia, a Marte antes de finales de la próxima década.
En enero, la NASA anunció que Artemis III, que llevará a cuatro astronautas, incluida la primera mujer a la superficie lunar, se había retrasado hasta al menos septiembre de 2026. El módulo de aterrizaje de SpaceX, en desarrollo, se reunirá con los astronautas en órbita antes de descender a la Luna. CH
