El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha anunciado que España entrará en el procedimiento abierto contra Israel en el Tribunal Internacional de Justicia a raíz de la guerra en Gaza. Una decisión que llega después de que España reconociera de forma oficial el Estado de Palestina, junto con Noruega e Irlanda. Y precisamente, estos tres países, ha matizado el titular de Exteriores, responderán así «de manera contundente y conjunta» a los «ataques» que están recibiendo de Israel por esta decisión diplomática.
De manera urgente, Albares convocaba a los medios en plena campaña para las elecciones europeas del próximo domingo. El titular de Exteriores, con tono sereno y firme, ha asegurado que «es un paso que llevamos valorando muchas semanas», que ya han dado otros países y que otros están pensando llevar a cabo. Se trata, añade, de «una decisión que tomamos ante la continuación de la operación militar en Gaza».
En este punto, Albares ha centrado su discurso en el nuevo ataque israelí sobre una escuela de la ONU para refugiados palestinos, que ha acabado con la vida de, al menos, 35 personas. El Ejército israelí ha confirmado el ataque y ha indicado que la escuela tenía integrada un complejo del grupo islamista y que en ella se escondían «terroristas que participaron en el ataque asesino contra comunidades del sur de Israel el 7 de octubre, que fueron eliminados». El Gobierno gazatí, sin embargo, ha asegurado que muchas de las víctimas eran civiles refugiados en la escuela.
Ante este hecho, el ministro de Exteriores español ha asegurado que el Gobierno de Pedro Sánchez adopta la decisión de entrar en el procedimiento abierto contra Israel en el Tribunal Internacional de Justicia para que «la paz regrese a Gaza y Oriente Medio» y por su «compromiso con el derecho internacional, en nuestro deseo de respaldar al Tribunal en su labor y para fortalecer así a las Naciones Unidas apoyando el papel del Tribunal como lo que es, el máximo órgano judicial del sistema».
Preguntado por la razones por las que no se retira a la embajadora española en Israel, como se ha hecho en el caso de Argentina tras la crisis diplomática abierta con este país, Albares ha asegurado que son «situaciones diferentes» y ha añadido que España toma las decisiones que considera son las mejores en cada caso para defender la dignidad de las instituciones y para alcanzar los objetivos de paz en Gaza y Oriente Medio.
El titular de Exteriores español reclamó «la finalización de las operaciones militares en Rafah para que vuelva la paz» y la retirada de «los obstáculos a la entrada de ayuda humanitaria». Asimismo, solicitó que cese «la destrucción de infraestructuras civiles». «Pedimos una vez más el cese de los bombardeos, el alto el fuego, la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes y el acceso urgente y sin restricciones de ayuda humanitaria a la población civil», subrayó. CH
