La UE ha acordado congelar indefinidamente los activos soberanos de Rusia, mientras Moscú intensifica sus amenazas de represalias contra Euroclear, el guardián de la mayor parte del dinero inmovilizado del Kremlin.
La decisión de la UE de utilizar poderes de emergencia para inmovilizar 210.000 millones de euros (185.000 millones de libras) de activos del banco central ruso supone un paso significativo hacia el uso del efectivo para ayudar a la defensa de Ucrania.
El presidente del Consejo Europeo, António Costa, confirmó que los líderes de la UE habían cumplido un compromiso, asumido en octubre, de «mantener inmovilizados los activos rusos hasta que Rusia ponga fin a su guerra de agresión contra Ucrania y compense los daños causados».
Antes de este paso, las sanciones de la UE que sustentaban los activos congelados debían renovarse cada seis meses, lo que podía crear la posibilidad de que un gobierno favorable al Kremlin, como Hungría, vetara la medida.
La decisión llegó horas después de que el banco central ruso anunciara que iba a presentar una demanda contra Euroclear, el depósito central de valores de Bruselas que posee estos activos. La organización, que antes era una parte poco conocida de la fontanería financiera internacional y ahora está en el punto de mira, no tiene voz sobre cómo se utilizan los fondos congelados.
La semana pasada, la Comisión Europea propuso un préstamo de 90.000 millones de euros (79.000 millones de libras) para Ucrania, garantizado contra activos rusos inmovilizados en la UE desde su invasión a gran escala. Pero el plan ha sido bloqueado por Bélgica, que teme una cascada de demandas desde Moscú y la incautación de bienes belgas en el país.
El primer ministro belga, Bart De Wever, se reunió el viernes con Keir Starmer en Downing Street para mantener largamente previstas conversaciones sobre el restablecimiento UE-Reino Unido, la migración y los activos rusos.
El portavoz de de Wever dijo que habían discutido «el posible uso del valor de activos soberanos rusos inmovilizados» y «acordaron seguir trabajando estrechamente para avanzar en este complejo asunto».
Un portavoz de Downing Street emitió un comunicado casi idéntico, diciendo: «Estaba claro, acordaron, que mantener la presión económica sobre Rusia y poner a Ucrania en la posición más fuerte posible seguiría siendo la única forma de lograr una paz justa y duradera”. CH




