El funeral del papa Francisco se llevará a cabo el sábado en la Plaza de San Pedro, mientras una gran cantidad de líderes mundiales y miembros de la realeza, incluidos Keir Starmer, Emmanuel Macron, Donald Trump y el príncipe de Gales, confirmaron su asistencia.
El papa, el jefe de los 1.400 millones de católicos del mundo, murió en su casa en el Vaticano el lunes a los 88 años después de un derrame cerebral. Se había estado recuperando de una neumonía doble por la que estuvo hospitalizado durante cinco semanas.
Su certificado de defunción, publicado por el Vaticano, dice que el derrame cerebral le causó un coma e insuficiencia cardíaca «irreversible». Un funcionario del Vaticano relató algunos de sus últimos momentos el martes, diciendo que su muerte llegó rápidamente y que no sufrió. Francisco cayó enfermo alrededor de las 5.30 de la madrugada del lunes y fue atendido por su equipo de médicos. Más tarde cayó en coma y murió a las 7.35 de la mañana.
La misa fúnebre comenzará a las 10 de la mañana, hora local, y será presidida por el cardenal Giovanni Battista Re, decano del colegio cardenalicio, en lo que se espera sea una ceremonia solemne.
El Vaticano publicó fotografías del cuerpo de Francisco, vestido con sus vestimentas, sosteniendo un rosario y yaciendo en un ataúd abierto en la capilla de su casa en Casa Santa Marta.
Su féretro será llevado a la Basílica de San Pedro el miércoles por la mañana en una procesión encabezada por cardenales. Permanecerá allí hasta las 19:00 horas del viernes, para permitir que el público presente sus respetos. La basílica permanecerá abierta hasta la medianoche del miércoles y el jueves. CH
