Rusia y China han anunciado que profundizarán sus ya estrechos lazos militares, ya que Vladimir Putin se reunió con Xi Jinping en Pekín en su primer viaje al extranjero desde que asumió para un nuevo mandato como presidente de Rusia. Es la última de una serie de declaraciones y señales de que la cálida relación entre los dos países es más fuerte que nunca.
La bienvenida de Xi a Putin en la alfombra roja, un hombre al que ha descrito como su «mejor amigo», se produce después de una gira por Europa en la que el presidente chino se enfrentó a duras preguntas sobre el comportamiento económico y político de su país. Recientemente, el gobierno de Biden anunció aranceles sobre productos chinos por valor de 18.000 millones de dólares, lo que enfureció a Pekín.
Putin elogió las conversaciones «cálidas y de camaradería» con Xi. A cambio, Xi dijo que la amistad entre China y Rusia era «eterna» y que se había «convertido en un modelo para un nuevo tipo de relaciones internacionales».
La visita de dos días está repleta de gestos simbólicos que subrayan la amistad mutuamente beneficiosa que ha florecido desde la invasión rusa de Ucrania.
Después del concierto del jueves, se espera que Xi y Putin den un paseo por un parque cerca de la Ciudad Prohibida, antes de sentarse a tomar el té y cenar con otros miembros de la delegación rusa.
El viernes se dirigirán a Harbin, una ciudad en el noreste de China que alguna vez fue conocida como «Pequeña Moscú» debido a su población rusa históricamente grande y su arquitectura de estilo ortodoxo ruso. El itinerario destaca la estrecha relación entre los dos líderes y los países.
A pesar de la presión de Occidente para que se apoye en Putin para poner fin a la guerra en Ucrania, el apoyo económico y moral de China a Rusia se ha intensificado desde el inicio del conflicto. Xi y Putin se ven mutuamente como aliados en un orden mundial paralelo internacional y «multipolar» que puede desafiar un consenso global liderado por Washington.
El año pasado, el comercio bilateral alcanzó un récord de 240.100 millones de dólares, y hay indicios de que aún más bienes, incluida la tecnología de doble uso que podría utilizarse en el esfuerzo bélico, están llegando a Rusia desde China a través de terceros países. Incluso sin envíos directos de armas a Rusia, los observadores occidentales dicen que el apoyo económico y político de China a Rusia ha sido un salvavidas desde febrero de 2022. El jueves, Putin dijo que estaba «agradecido» a China por sus esfuerzos para tratar de resolver «la crisis de Ucrania».
La declaración conjunta anunció planes para ampliar los ejercicios militares conjuntos, pero proporcionó pocos detalles. El año pasado, una flotilla naval china se unió a las fuerzas navales y aéreas rusas en el Mar de Japón para ejercicios conjuntos. En marzo, las armadas china y rusa llevaron a cabo simulacros conjuntos en el Golfo de Omán, junto con las fuerzas iraníes. CH
