Las pruebas de detección de la viruela símica se intensificaron en todo el mundo a medida que surgen más casos fuera de África e incluso China ya instrumentó una serie de medidas preventivas.
Los esfuerzos de vigilancia contra la viruela símica se están intensificando en todo el mundo, ya que los ensayos de un nuevo tratamiento mostraron resultados decepcionantes contra la variante que impulsa el brote actual.
El Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC, por sus siglas en inglés) modificó su evaluación de nivel de riesgo de viruela símica, de bajo a moderado. La decisión se produjo después de que Suecia informó del primer caso fuera de África.
Pakistán también ha reportado su primer caso de viruela símica, y China ha anunciado que comenzaría a examinar a los viajeros para detectar el virus. La Agencia de Seguridad Sanitaria del Reino Unido declaró que no había casos del virus en Reino Unido y que el riesgo se consideraba bajo, pero que se estaba planificando para cualquier caso en el futuro. El ECDC, con sede en Estocolmo, dijo que era «muy probable» que se importaran más casos a Europa.
«Debido a los estrechos vínculos entre Europa y África, debemos estar preparados para más casos importados», de acuerdo con la directora del ECDC, Pamela Rendi-Wagner.
La Organización Mundial de la Salud declaró que el aumento de casos de viruela símica es una emergencia de salud pública, después de que los brotes se extendieran desde la República Democrática del Congo (RDC) a los países vecinos. CH