El pasado 12 de octubre tuvo lugar un acto muy emotivo durante la celebración del 86 cumpleaños de doña Isabel Conesa Medina: en el Museo Aeronáutico de Málaga, se halla en exposición un modelo de avión Douglas DC-3, similar al que ella tomó desde el aeropuerto de Melilla, el mismo día de su boda que se celebró el 19 de septiembre de 1959; así es que Isabel rodeada de varios familiares y de su hijo Juanjo Florensa, recordaron dicha fecha.
Isabel Conesa Medina y Juan Florensa Riba, músico militar recién destinado a Melilla, se casaron a las 08:00 horas de la mañana en la Iglesia de la Medalla Milagrosa siendo oficiada por el Padre Matías Rojo Puente. La tela con la se confeccionó el traje de novias fue adquirida en la tienda de “Galerías Preciados” que por entonces se ubicaba en Melilla en la esquina de la Calle Ejército Español con la Calle Cervantes.
En aquellos años el periódico también ubicado en la calle Ejército Español, fundado por Cándido Lobera Gilera en 1902 conocido como “El Telegrama del Rif“ publicitaba a “Galerías Preciados” de las distintas sucursales que existieron en Tánger, Tetuán y Melilla.
Años más tarde allí se estableció durante muchos años el establecimiento HADITOR, empresa creada por el industrial melillense José Torcello García. Doña Isabel ha conservado durante todos estos años los billetes de la Compañía Iberia con la correspondiente numeración 2517755-56 con la que realizaron el viaje de novios, aquel 19 de septiembre de 1959, hecho que ha llamado positivamente la atención al responsable de las visitas al Museo del Aeropuerto de Málaga como es Joaquín Carranza, precisando que el DC-3 expuesto es en realidad una versión militar conocida como C-47A.
Los primeros tres DC-3 reconvertidos para sus uso civil por la compañía Iberia con una configuración interna de 21 asientos entraron en servicio en julio de 1944 en las dos únicas líneas existentes como fueron las de Barcelona-Madrid-Lisboa y Sevilla-Tánger-Tetuan-Melilla (en realidad Taouima). Estas unidades C-47-A de la USAF protagonistas de la Operación Torch llegaron con escaso combustible por equivocación el 8 de noviembre de 1942 a la zona del protectorado español en el norte de Marruecos a los aeródromos de Zeluán, Villa Sanjurjo (Alhucemas) y Tetuan creyendo los pilotos que se encontraban en territorio francés.
El Douglas DC-3 con una de las mejores aviónicas del siglo XX ha sido protagonista en la aparición de muchas películas como “El Arca Perdida” (Steven Spielberg, 1981), donde en una escena Indiana Jones y Marion se embarcan en un DC-3 de la aerolínea “Air East Asia” con destino a Egipto.
La Compañía Iberia llegó a disponer de hasta 24 unidades de este tipo de avión siendo utilizados en sus líneas aéreas hasta el año 1973. De hecho en la antigua terminal del aeropuerto de Málaga, ahora reconvertida en Museo Aeronáutico, se rodaron en 1965 escenas de la película “Secuestro Bajo el Sol” dirigida por Jacques Deray con un reparto que incluía a Jean Paul Belmondo y Geraldine Chaplin.
Este año por tanto se han cumplido el 65 aniversario de aquel viaje de bodas en un DC-3 con destino Madrid vía Málaga, que tuvo lugar el mismo día de la boda teniendo que desplazarse hasta Taouima, a 14 kilómetros en la localidad de Nador en Marruecos, en un autobús Chevrolet que partía desde las oficinas de Iberia que entonces estaban situadas en la Avenida del Generalísmo haciendo esquina con la calle Cándido Lobera.
Ese fue el aeropuerto de Melilla ubicado entonces en Marruecos hasta que se construyó dentro del territorio de Melilla, inaugurándose el mismo el 31 de julio de 1969, cumpliéndose por tanto este año 2024 su 55º Aniversario. Según información del billete conservados por doña Isabel durante todos estos años el DC-3 salía desde Taouima hasta el aeropuerto de Málaga con nº de vuelo IB 317 con salida a las 12:10 horas , siendo el siguiente vuelo a Madrid el IB 361 con salida a las 14:25 horas.
El precio del billete por persona se elevaba a las 990 pesetas. Para hacernos una idea del valor actual se corresponderían a unos 1292 euros según información aportada por Samuel K. Allen responsable de “Measure Worth Foundation”. CH