El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha confirmado este lunes el reparto de 200 millones de euros para reeditar el Bono Alquiler Joven, tal y como acordaron hace diez días el Ministerio de Vivienda y las comunidades autónomas. «No quiero una España donde haya propietarios ricos e inquilinos pobres, por eso mi Gobierno ha fijado como prioridad absoluta la vivienda», ha defendido en la jornada ‘World in Progress’ de Prisa después de la manifestación organizada este domingo en Madrid por el derecho a la vivienda. Pero estas ayudas a jóvenes para pagar el alquiler no son suficientes, según Sumar y Podemos, para atajar el problema y advierten de que si no se acompañan de topes de precios, no solo no se evitarán las subidas de precios, sino que será en el bolsillo de los caseros donde acaben las ayudas.
«No es por ahí», ha escrito en la red social X el portavoz parlamentario de Sumar, Íñigo Errejón, en respuesta al anuncio de que este martes el Consejo de Ministros dará luz verde al reparto de fondos para el Bono Alquiler Joven acordado en la última Conferencia Sectorial de Vivienda. «Esto es hacerle otro ‘bizum’ de dinero público a los caseros, que se quedarán la ayuda pública y volverán a subir los precios», ha añadido Errejón, apuntando a la posibilidad de que, al no existir en buena parte del país tope al precio de los alquileres, los propietarios suban el precio de los nuevos contratos y este alza absorba las ayudas dadas a los inquilinos.
La propia Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda del Gobierno, se pronunció unas horas más tarde en este mismo sentido: en su opinión, la solución al aumento de precio de los alquileres no pasa por dar «dinero a los rentistas o en forma de ayudas», y apuesta por «intervenir el mercado de la vivienda y regularlo por ley», una opción que el PSOE no contempla.
Desde la formación de Díaz recalcan que la vivienda es una «emergencia social» y califican de «insuficientes» las primeras reacciones de la ministra de Vivienda, Isabel Rodríguez, que se ha limitado a trasladar un mensaje de «comprensión y esperanza» a quienes este domingo salieron a la calle en Madrid para clamar por una vivienda digna. La titular de la cartera ha defendido en una entrevista en TVE la gestión del Gobierno en materia de vivienda. «Los instrumentos están en marcha», ha expresado, adelantando la aprobación este martes de los fondos comprometidos para reeditar la ayuda al alquiler de 250 euros al mes a menores de 35 años.
«El Bono Alquiler Joven no va a la raíz del problema», ha remarcado Urtasun, instando a sus socios de Gobierno a «intervenir el mercado». «Necesitamos obligar a que el sistema de control de precios del alquiler se aplique en todo el territorio», ha concretado reclamando así el despliegue de ley de vivienda más allá de Cataluña, que por el momento es la única comunidad donde se han declarado zonas tensionadas -está pendiente de aprobación Errenteria, en Guipúzcoa- y se ha topado el precio de los nuevos contratos de alquiler. «Este sistema de control está funcionando», aseguran desde Sumar, al mismo tiempo que señalan la necesidad de perseguir el uso fraudulento del alquiler temporal y defienden que «merece la pena» estar en el Gobierno para «pelear» por la vivienda.
Por todo ello, y ante la decisión del Ministerio de Vivienda de aprobar las ayudas del Bono Alquiler Joven este martes, los ministerios de Sumar han presentado una serie de observaciones en el seno del Gobierno alertando de que puede agravar el problema de vivienda. Fuentes de la formación de Díaz remarcan que tras más de dos años, la medida ha demostrado «ser insuficiente» y, ante esta situación, plantean otras medidas como «obligar a las comunidades autónomas a aplicar el control de precios o condicionar la financiación en esta materia»; «modificar la Ley de Arrendamientos Urbanos e incluir los alquileres de temporada en la regulación de precios»; y «prohibir la especulación en zonas tensionadas, es decir, prohibir la compra de viviendas con fines diferentes a la residencia o a un alquiler asequible».
Desde Podemos también exigen al Gobierno que limite el precio de los alquileres para evitar que el Bono Joven acabe en manos de los propietarios y cargan contra el Ejecutivo por la falta de acción. «Las ayudas para el alquiler para jóvenes que Sánchez ha anunciado no solo ya estaban anunciadas, sino que surten el efecto contrario -suben más los precios- si no se aplican topes al alquiler», ha advertido la secretaria general de la formación morada, Ione Belarra, en redes sociales. «Así no», ha zanjado.
«¿De verdad no sabe el Presidente que las ayudas al alquiler, si no se topan los precios, provocan que siga subiendo el precio de la vivienda y que rentistas y fondos de inversión se llenen más el bolsillo? Sí lo sabe, sí», ha afirmado en el antiguo Twitter la secretaria política de Podemos, Irene Montero. «Gobernar significa hacer lo que hay que hacer: limitar los precios, prohibir la compra a fondos de inversión… Gobernar para la gente y no para los rentistas», ha añadido dirigiéndose a la ministra de Vivienda.
También el Sindicato de Inquilinas considera que el Ejecutivo «escucha» más a los caseros que a los inquilinos, pese a la manifestación masiva celebrada este domingo en Madrid. «El Gobierno ha escuchado a los rentistas. Este tipo de ayudas, sin bajar los alquileres y cuestionar la propiedad, se lo quedan los de siempre», lamentan. «No vamos a parar: queremos una bajada inmediata al 50% o lo haremos nosotras», añaden. La organización amenaza con organizar una «huelga» de inquilinos en el pago del alquiler, para presionar así a propietarios y administraciones y tratar de forzar una bajada de las rentas.
A las críticas de Sumar, Podemos e inquilinos al Bono Alquiler Joven se han sumado también las del PP, que ha afeado a Sánchez que su «plan» para atajar el problema de la vivienda consista en un «reanuncio». La formación de Alberto Núñez Feijóo recuerda que la de 2024 será la tercera convocatoria de esta ayuda, que lleva en marcha desde 2022. «Es decir: no supone ninguna mejora», declaran a Europa Press fuentes populares.
Desde la oposición critican también la propia configuración de la ayuda. Hace menos de dos semanas, a la salida de la Conferencia Sectorial en la que se acordó el reparto de 200 millones para reeditar el Bono Alquiler Joven, el consejero madrileño de Vivienda, Jorge Rodrigo, se quejó de que el decreto que regula esta subvención «es muy farragoso» e impide tramitarla con agilidad, algo que el Ministerio reprocha con frecuencia a las comunidades que, como Madrid, van más rezagadas en la concesión de los fondos