El recién nombrado ministro de Economía, Carlos Cuerpo, espera que en las próximas semanas se apruebe la Autoridad de Defensa del Cliente Financiero, un organismo que ya había sido aprobado en el Congreso en la pasada legislatura, pero decayó con la convocatoria anticipada de las elecciones generales del pasado 23 de julio y la disolución de las Cortes Generales. El hasta hace poco secretario general del Tesoro Público y Financiación Internacional ha recordado que se trata de un “movimiento prioritario” para completar el sistema de protección e inclusión de los clientes financieros, y que terminará por “brindar mayor seguridad a los clientes”. Se trata, según el ministro, de uno de los flecos que le quedan al Gobierno en su senda de crecimiento económico y protección de los clientes financieros.
Durante su intervención en el encuentro de Spain Investors Day, Cuerpo ha sacado pecho de los buenos datos macroeconómicos de la economía nacional, recordando que el año pasado el país se situó a la cabeza del rendimiento en toda la eurozona con un crecimiento del 2,4%. “España ya contribuye a tener una Europa más fuerte”, ha dicho al inicio de su discurso, este jueves. “El mundo se está volviendo más complejo. Mi predecesora Nadia Calviño decía que había movimientos tectónicos, pero nos estamos acostumbrando a vivir en estos momentos de incertidumbre y España se ha movido muy bien en ellos. Solo hay que mirar los datos de 2023″, ha reiterado.
En su lista no ha faltado nada. Desde los buenos datos del mercado laboral, con la creación de más de medio millón de empleos el año pasado, hasta el cumplimiento de los hitos marcados por Bruselas para el desembolso de los fondos Next Generation. Todo marcado por una política que ha insistido, puede compaginar crecimiento y justicia social con responsabilidad fiscal. “Las expectativas para España mejoran. Es un país con un buen balance en las finanzas públicas y eso da más certeza a los inversores”, ha recalcado. En paralelo, Cuerpo se ha comprometido a mantener una política económica continuista con su predecesora fortaleciendo las tres patas que sostienen el desarrollo del país: justicia social, reformas estructurales que mejoren la productividad y responsabilidad social. “Nadia Calviño hizo un maravilloso trabajo, solo hay que ver los números. Y yo espero seguir por la misma senda”, ha añadido.
Ha incidido especialmente en los avances en materia laboral. Ha recordado que gracias a la reforma laboral hay más personas con contratos fijos y eso ha permitido mantener el consumo de los hogares en plena crisis inflacionaria. No obstante, dio margen de mejora. “No podemos ser complacientes, hay que seguir trabajando para mejorar la relación entre oferta y demanda de puestos de trabajo, seguir reduciendo el paro estructural y mejorar la cualificación”.
Para él, un factor clave es la actualización del salario mínimo interprofesional, que espera se siga incrementando hasta ponerse a la par del resto de países europeos. Esto, según él, impulsará la productividad y el crecimiento del país. En añadido ha destacado la importancia de tener un equilibrio en la balanza de pagos. “Las reglas fiscales han vuelto, pero son mejores que las que teníamos antes y son compatibles con el respaldo de los hogares, la inversión y el desarrollo del país”, ha dicho.
Por último ha mandado un mensaje a los inversores sobre la “estabilidad financiera” que tiene el país. “Al inicio del año pasado se vivieron momentos de gran incertidumbre con la quiebra de varios bancos en Estados Unidos y algunos desequilibrios en Europa, pero al analizar los posibles efectos en la banca española los resultados arrojaron sólidos fundamentos con una gran liquidez. Es increíble la evolución que ha tenido el sistema financiero en la última década y su resiliencia”. Con información de Cinco Días.