La policía de Alemania arrestó a ocho presuntos miembros de una célula terrorista de extrema derecha que presuntamente estaba planeando la toma armada de las regiones orientales para establecer un régimen inspirado en los nazis que llevaría a cabo una «limpieza étnica», de acuerdo con diversos fiscales federales.
En medio de una ofensiva contra los militantes neonazis, los ciudadanos alemanes que se autodenominan Sächsische Separatisten (separatistas sajones) fueron detenidos en varias redades en el este de Alemania y la ciudad fronteriza polaca de Zgorzelec, con otros siete sospechosos en la mira de los investigadores.
La revista Spiegel informó que tres de los sospechosos eran políticos que habían ocupado cargos locales por el partido de extrema derecha Alternative für Deutschland. Uno de ellos, identificado solo como Kurt H., recibió un disparo en la mandíbula por parte de la policía durante la redada en la ciudad de Grimma después de que tomó un rifle.
La fiscalía federal dijo en un comunicado que los separatistas sajones, que suman entre 15 y 20 personas, habían estado activos desde al menos noviembre de 2020, con una ideología «caracterizada por ideas racistas, antisemitas y parcialmente apocalípticas».
El grupo, compuesto principalmente por hombres jóvenes, algunos de ellos adolescentes, supuestamente rechaza el orden democrático liberal de Alemania, que cree que está a punto de colapsar y que implosionará en un «Día X» no especificado.
«El grupo tiene la intención de obtener el control de ciertas áreas en Sajonia y potencialmente en otros estados de Alemania Oriental, es decir, por la fuerza de las armas, para establecer estructuras gubernamentales y sociales inspiradas en el nacionalsocialismo», dijo la oficina del fiscal.
Los presuntos conspiradores se habían estado preparando para la lucha violenta con entrenamiento paramilitar «en equipo de combate», practicando «guerra urbana, manejo de armas de fuego… así como patrullaje». La policía comunicó que el grupo había adquirido uniformes de camuflaje, cascos de combate, máscaras antigás y chalecos antibalas, pero no indicó que hubieran encontrado armas.
La ministra del Interior, Nancy Faeser, que ha calificado en repetidas ocasiones a los extremistas de derecha como la mayor amenaza para la seguridad nacional, elogió los arrestos como «un éxito importante» en la lucha contra la extrema derecha militante.
Por su parte, el ministro de Justicia, Marco Buschmann, afirmó que la acción policial era un recordatorio de que el sistema constitucional y el orden libre y democrático de Alemania «están amenazados desde muchos lados».
En 2022, la policía detuvo a un extenso grupo de conspiracionistas de extrema derecha presuntamente vinculados al movimiento Reichsbürger (Ciudadanos del Reich) y que se creía que planeaban derrocar violentamente al parlamento del país, eliminar por la fuerza el orden estatal existente y sustituirlo por su propio régimen. CH
