El fondo británico Zegona, que desde octubre de 2023 es propietaria de Vodafone España, ha planteado un despido colectivo en la compañía que podría afectar hasta a 1.198 trabajadores, lo que supone un tercio de su plantilla. Según informó la compañía, el procedimiento surge desde el convencimiento de que es la «única fórmula para garantizar la viabilidad y competitividad de la empresa a futuro» y se aborda «con una actitud responsable y dialogante, desde la operadora, y con la voluntad de alcanzar el mejor acuerdo posible para todas las partes».
La operadora aseguró que la decisión de iniciar este procedimiento se debe a «razones económicas, productivas y organizativas, determinadas por el fuerte deterioro financiero y comercial». La compañía ha disminuido sus ingresos totales en un 8% y ha perdido aproximadamente 400.000 clientes de contrato en los dos últimos años. También se debe a la “necesidad urgente” de efectuar un cambio organizativo y operativo, con el objetivo de redimensionar la organización para adaptarse a la nueva realidad de mercado y recuperar la competitividad.
Según fuentes de la compañía, Zegona ya señaló en su memoria que Vodafone España tenía una estructura de altos costes de personal en comparación con empresas del sector. El plan industrial del fondo se sustenta sobre un nuevo modelo organizativo que ayude a garantizar la viabilidad del negocio. CH